El reciente Decreto Ejecutivo N.º 177, emitido el 30 de diciembre de 2024, reglamenta la Ley 52 de 27 de octubre de 2016, modificada por la Ley 254 de 11 de noviembre de 2021, que establece la obligación de mantener registros contables para determinadas personas jurídicas en Panamá.
Estas medidas buscan garantizar la transparencia fiscal y cumplir con los estándares internacionales.
Principales aspectos:
¿A quiénes aplica? La normativa abarca a sociedades anónimas, sociedades de responsabilidad limitada, fundaciones de interés privado y otras personas jurídicas constituidas en Panamá que no realicen operaciones dentro del territorio nacional y se dediquen exclusivamente a la tenencia de activos. Están excluidas las personas jurídicas que son contribuyentes fiscales en Panamá, que están listadas en bolsas de valores o son armadores o fletadores de naves.
Registros contables obligatorios: Las entidades deben mantener registros claros y actualizados que reflejen su situación financiera, permitiendo la elaboración de estados financieros precisos.
Rol del agente residente: Los agentes residentes (abogados o firmas de abogados) tienen la responsabilidad de custodiar y mantener al día los registros contables de las entidades que representan.
Sanciones por incumplimiento: Las entidades y agentes residentes que no cumplan con la normativa estarán sujetas a sanciones administrativas y legales, incluyendo multas que van desde B/.5,000 hasta B/.1,000,000, la suspensión del agente residente, la disolución forzosa de la entidad en casos graves de incumplimiento y la posibilidad de ser objeto de investigaciones adicionales por violar normas de prevención del blanqueo de capitales y financiamiento del terrorismo.
Deadline: La obligación de reportar a la Dirección General de Ingresos inicia el 1 de enero de 2025, y los reportes deberán presentarse a más tardar el 15 de junio de cada año.
Si su sociedad o fundación está sujeta a la obligación de llevar registros contables, le invitamos a coordinar con nuestro equipo para asegurarse de que todo esté en orden. Mantener el cumplimiento es esencial para evitar sanciones y fortalecer su posición legal y financiera.
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